Las puras, simples y llanas actitudes, verbalizadas y/o enrostradas a las contrapartes específicas o a la sociedad en general, con el desplante necesario, son indicio de una incompleta, aplacada, ineficaz, fallida o inexistente capacidad de raciocinio, acaecida por los motivos que, persona a persona, van interactuando, pudiendo ir desde la inmadurez, hasta un deterioro mental por la vida y prácticas que han tocado padecer.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario