[Un asunto de optar en lo que podemos creer desde nuestras propias conclusiones]
Lean minuciosamente la pregunta que titula este texto y verán que carece de sentido.
La misma pregunta contiene el germen de su sinsentido.
El "después" de algo señala su ocaso luego, podemos modificar la pregunta para hacer una afirmación más verosimil y tenemos la siguiente frase: Ni antes, ni después de una vida esa vida existe, lo que nos lleva a incluir un aspecto de la existencia que comúnmente no se considera y es el siguiente; Fuera del espacio tiempo que padece quien desarrolla su existencia viva, ese lapso es finito, en cuanto tiene un inicio y un fin, pero es eterno en cuanto el lapso acaecido, sin instante alguno capaz de prevalecer por sobre los demás, es uno solo en su permanente suceder dentro de cualquier otro acontecimiento que va componiendo el sistema de eventos capaces de ser parte y formar parte del universo.
Es por esta esta suerte de "razonamiento lingüístico" que asevero que creyentes y no creyentes tienen, en parte, la razón por cuanto hay una vida eterna, pero tal eternidad mora en la imperecedera vida que creemos vivir, ilusoriamente, instante por instante cuando tal sumatoria de momentos es la propia y personal eternidad de cada quien, que culmina de desplegarse, para nosotros, en el fin de su último instante conformador, tras el cual, ACASO, se suspende la sucesión referida capaz de ocultar la imperecedera persistencia de nuestra existencia que "una vez" fue temporal pero luego "recobró" su "vectorial" clímax permanente.
Entonces la respuesta a la pregunta inicial es NO, por cuanto una vida nunca tuvo, tiene, ni tendrá un después.
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