miércoles, 2 de julio de 2008

Impresiones acerca de Salvador Allende G.

[©SmcArq] Mi abuelo era "hermano" de Salvador Allende en la misma logia; lo apreciaba mucho, y cuando se cerró la Resp Log. Hiram 65 de Santiago de Chile, después del golpe, mi abuelo dejó la Masonería para siempre.

Pero lo que quiero hablar de Allende es lo que más tengo presente de él, cuando medito en relación a su persona:

Él quería la inmortalidad, cosa que quedó demostrada cuando a un testigo de los hechos finales que precedieron al golpe (y esto está grabado en un programa que fuera transmitido a todo Chile) le dijera "toque aquí (parte de su pecho); aquí hay carne de estatuas".
Creo firmemente que todo lo que hizo como político, que, como todas las cosas de los hombres son complejas y diversas en sentidos la mayoría de las veces, siempre apunto, a la vez de tantas otras cosas, hacia su inmortalidad.

La inmortalidad de Salvador Allende G. fue una construcción exitosa de él mismo, tarea que han continuado sus seguidores políticos.

No me parece nada extraño; todos trabajamos hacia ese fin, lo queramos reconocer o no; está en nuestros genes esto de "continuarnos" en nuestra especie. Es casi cosa de sentido común. El mismo aire grandilocuente de mis textos me da la razón, pues siempre, en lo más interno de mi conciencia, he querido trascender desde mis capacidades. Todos igual.

Una cosa es cierta; con las complejidades necesarias del trance histórico adonde llegó finalmente, tuvo los pantalones para seguir con su proyecto hasta el final (proyecto que, como ya lo he dicho, poseía muchos vectores; unos idealistas, otros egoístas y egocéntricos y otros más que no se me ocurre como nombrar, y que dejo a su conciencia. Los seres humanos, creo, actuamos por razones que solo por momentos logramos captar).

Caminó hasta el 11 de Septiembre derecho hasta el sofá del rincón de la Casa de Gobierno, donde, en soledad, atrapó la suerte de todo un país para sí, dejando que tal violento signo convergiera hasta el arma que terminó con su vida.

Yo creo que se inmoló; no creo en su suicidio a secas; habría sido absoluta y profundamente contradictorio y patético que, llegando hasta donde llegó, con un casco sobre sus hombros, armado y dando instrucciones como un soldado, se hubiera tomado el disparo que se autoinfirió como una escapatoria.

Mi opinión.
___________________________

Otro día hablemos de Prat, que es otro caso, acaso más apasionante.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Estimado Sergio:

Que acertado es tu enfoque. Allende era pije de origen (hoy sería cuico), él se ubicó en la extrema izquierda marxista revolucionaria para sobresalir entre sus pares, más que por resentimiento o rechazo a la clase que pertenecía, pues conservó y cultivó muchas de sus características, como elegancia en el vestir, la buena mesa, el buen vino, whisky del mejor, etc.

Para el objetivo perseguido, fue una excelente decisión (similar a la que tomó Fidel Castro, un par de años después de tener el poder en Cuba), porque sumó a su favor la gran maquinaría propagandista de la izquierda marxista, nacional y mundial que en esos años era liderada por la Unión Soviética con un fuerte éxito resultante en el expansionismo a muchos países del modelo comunista.

Esta máquina, tan vigente ahora como entonces, lo ha subido a la categoría de héroe y casi de santo. No solo le han erigido estatuas, sino que también su nombre está en museos, centros culturales, calles y hasta en chapitas y ropa con su esfinge que visten algunos niños.

Que bien logrado el objetivo propuesto, lamentablemente la ráfaga de la metralleta le borró la sonrisa de satisfacción esbozada en el momento del suicidio.


Atte.


L.A.

Sergio Meza C. dijo...

Vaya; mis antenitas de Vynil me dicen que no aprecias al susodicho presidente.

Yo lo percibo como un ser profundamente humano, transparente en sus intensiones que,buenas o malas, estabn a la vista, y eso es suficiente para mí.

Semejante tipo de personas no son un peligro para nadie, salvo para las mentes que vieron en él lo que tenían dentro de sí.

Todos somos un gran signo de interrogación, entrecortado por signos de exclamación, esporádicos y repentinos.

editorial meteoro dijo...

Desde mi humilde punto de vista es muy acertada, válida y legítima la observación de Sergio sobre la figura del ex-presidente Salvador Allende.
Estoy seguro que no son pocos los que ya creen que es hora que el tema de Allende tome una distancia madura e histórica,en pocas décadas debiera ser como la del antiguo debate Carrera y Ohiggins.
Me gustaría complementar la interesante visión del sr. Meza, añadiendo que junto con la arista de la tercera vida, ese matiz sobre lo trascendete o vida de la fama (la misma aludida por Jorge Manrique en el castellano antiguo, "Coplas por la muerte de su padre",clásico de la literatura española de todos los tiempos.)
es clara, precisa y consecuente (ideológicamente de acuerdo o no con sus contenidos)a una acción en cierta medida proléptica, de esa mañana del 11 de Septiembre de 1973.
Ese factor viene impreso en su mismo ya famoso último discurso : "Seguramente ésta será la última oportunidad en que pueda dirigirme a ustedes.... " así lo abre, ya se dilucidan las verdaderas intenciones del ex-mandatario.

Tres años antes una mañana del 25 de noviembre de 1970, Mishima, el famoso escritor y dramaturgo japonés, llevaba la última parte de una tetralogía a su editor. Después se dirigió junto con los miembros de su grupo a un cuartel del ejército que ocuparon, y tras un discurso a la tropa, él y su compañero Masakatsu Morita se suicidaron mediante seppuku.

Allende Gossens hace su propio seppuku (o arakiri: un suicidio en honor a su emperador- al hijo del sol naciente).
Allende Gossens, eficaz manera de llamarle por un gran volumen de emisores de contenido, sabe muy bien de dónde viene y adonde va.
La nomenclatura de la centenaria figura es un ángulo muy cercano al perfil de la fama (el cómo quiere recordarlo la historia).

LLamarlo , con los dos apellidos, pudiese ser en intimidad eludible por los que más domésticamente quisieran recordarle de otra manera (proletariadante con "forceps" al "Compañero Presidente" - concepto heredado del pueblo militante - o con el "cariño empático" de las fuentes de soda que le decían Chicho- heredado del concepto "chichito" que rescata su "nana" al no poder pronunciar Allende niño su propio nombre diminutivo "Salvadorcito". Vale la pena reflexionar como el propio pueblo americano quiere o no recordar a su propio martir demócrata : Bob, JFK o Jhon Fitzgerald Kennedy, en cada una de las 3 acepciones o versiones nominales hay también un juicio de su fama o perfil de la misma.
A Allende la historia lo recuerda así "oligárquicamente", en el sentido propio de objetivos de dominación , a veces lamentables nomenclaturas socio-condicionantes.
Sin embargo es asi, es la burguesía, la media, la alta o el grupo socio económico que el cientista de turno quiera a su vez llamar, la que anhela el poder con pasión, porque lo necesita, son las clases dominantes las que temen al "no tener el poder", y es el mismo miedo el que mueve a la acción de las masas (el miedo a que se prolongue "lo injusto"),
y es el mismo factor (los temores)los que provocan la violencia de cualquier grupo de mamiferos (más aún el más depredador de las especies : el hombre)

De esa clase dominante proviene Allende, es heredero de las "metas idealistas" de Marmaduque Grove (http://www.puntofinal.cl/556/avionrojo.htm), su pariente "revolucionario-militar y diplomático" quien lo "acoge" indirectamente por sus herederos viñamarinos en el mausoleo subterráneo que protegió su tumba en el Cementerio de Santa Inés, en su Viña natal.
Y remarco lo de Meza, la inmolación implícita : "...pagaré con mi vida la lealtad del pueblo".

La contemporánea y hoy claramente decaida "Concertación de Partidos por la Democracia" es quien lo retorna a la "vida de la fama" más concreta, como que para ser famoso necesariamente hay que tener una estatua en Santiago - ciudad que pareciese fundada para "someter" a las provincias desde Pedro de Valdivia hasta la fecha - .

Son los líderes de hoy, quienes se confunden más que antes.
Y "patudamente", dicho en jerga popular, muchos de ellos piensan que son aludidos por Allende cuando dice :
"...superarán otros hombres este momento gris y amargo.."
Permítanme creer que la visión de Allende es literalmente "allende" los años co-carnales de sus generaciones inmediatas.
Esos hombres no son los de hoy y no pueden ser si no al menos nuestros nietos, los nuevos hombres de un futuro desideologizado en el sentido panfletario - que distanciado de su "trance histórico" puedan realmente superar con mayúsculas esta encrucijada social.
Sin embargo es la vanidad de los actuales gobernantes la que los traiciona, la misma vanidad que traiciona a Pinochet en su auto imposición de candidato único en su segunda década de mando (hay antecedentes objetivos que si llamaba a elecciones libres en la primera década era la derecha la que retomaba el poder)
Y es la más grande vanidad la del mismisimo Allende, político y hombre, la que traiciona su propio proyecto (¿era acaso la revolución de Fidel y los formatos soviéticos más legítimos que el triunfo democrático de la unidad popular?, ¿teniamos necesariamente que imitar modelos foráneos? )
Chile es un hito en el aspecto de la democratización de sus grandes colectivos, no pudieron ni los socialistas de la Europa Occidental ni ningún régimen de izquierda del mundo llegar al poder de la manera "higiénica" y electoral que lo hizo Allende (más allá de la factibilidad política y económica del proyecto en Chile no era necesario "Cubanizar" el proceso,menos "altamarinizarlo" ni "suicidar a un pueblo" pero la vanidad nubla al poder (fue prudente incluso en sus ultimas palabras : "El pueblo debe defenderse, pero no sacrificarse.", la vanidad es hermana del poder, y no es fácil leer a la distancia otra cosa que no sea "envidias" políticas sanas o no - aunque la condición de envidia saludable no puede ser en caso alguno, menos en el poítico - que Allende tenía más de un enemigo dispuesto a modificar su castillo de arena - enemigos externos e internos...este faro de "democracia progresiva" no le acomodaba ni al Soviet ni a EE.UU, de seguro Allende no se decepcionó solo de quienes asumieron la voluntad de sacarlo por la fuerza, si no también de quienes no tuvieron la información de inteligencia politica precisa o simplemente no se la entregaron)

Volviendo a los referentes de fama es inevitable hablar del destino de José Manuel Balmaceda, y su visión de paz futura a costo de su vida. Aún quedan testigos vivos que heredan y acuñan la idea de que Balmaceda fue un carajo, aún quedarán chilenos vivos en el presente siglo que morirán con el mismo juicio de "carajidad" sobre el ex-presidente Allende.
Lo mismo se podrá decir de muchos personajes de nuestra historia.
Agreguen los académicos históricos todas las acepciones de carajo posibles para tan - y en esto poco discutible - diverso abanico de visiones de Allende.

El discurso sigue, y es clara la anticipación de su inmolación : "...pagaré con mi vida la lealtad del pueblo.." como Mishima, como Balmaceda o como un rock star moderno , los Jendrix, los Cobain, etc (cual personaje de Bob Geldof en The Wall- Film de Alan Parker de los años 80¨...cuando colapsa por desarraigo y arroja una TV por la ventana, se depila las cejas y se apoya en el vertice de un ventanal roto - sangran sus venas, ¿es la fama?, ¿son las drogas? ¿es la soledad?)
Las palabras del propio Allende avalan la publicación de Sergio Meza.
De antología ciertas palabras acertadas del malogrado ex-mandatario :"..no se detienen los procesos sociales ni con el crimen ni con la fuerza..."
En eso tiene razón, y comparto su vision de tener fé "...en Chile y su destino" (aunque hablar de fé en el mundo marxista es de por si una "blasfemia").
Yo soy cristiano, católico y hablo de esta nueva fé, la de pensar en el hombre nuevo - desideologizado, con un Cristo que también de cierta manera se inmola (se entrega).
Y citando a uno de los más importantes poetas contemporáneos de la humanidad (por coincidencia chileno) puedo cerrar este comentario : " ...la izquierda y la derecha unidas jamás serán vencidas" N.Parra...
A izquierdas y derechas las une un mismo factor : la vanidad, la búsqueda de poder, la vida de la fama.-

Alex Morovic / ciudadano.-

Sergio Meza C. dijo...

Alex:

Dame un par de días, que este comment amerita estudio, análisis y una respuesta de mi parte como corresponde.

Un gran abrazo amigo, y gracias por tu comment, un post de los buenos en sí.

Muchos blogs matarían por tales comentarios. Hay algunos que se repletan de suspiros, saludos y "buena onda". Aquí me doy por más que satisfecho con acometidas como la tuya.

SmcArq

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