
Literariamente detona un modelo de sintaxis entre la lectura corporal del espacio que habita, hacia ritmos intrínsecos de contrastes de elegancia, desenfado e Ironía, con pasos de taconeado acento, desde intensiones manifiestas de abstracto fin y coreográfico énfasis. Calígrafo árabe destacando el texto que se despliega en la fachada de la gala y la elegancia; escritor de trazos curvados, rematados por golpes de agresivo contraste angulado, en la tela blanca de escenarios gráciles y estilizados; intérprete de inmateriales lugares detonados por la virtual caricia de sus movimientos creativos y trasparentes. Como Bach, capaz de restar impresión para establecer la acogida del ojo en el cuerpo, como si la comprensión y el goce estético se hicieran uno, en el desempeño fugaz y tenue del alma.
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